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Reseña histórica de las celebraciones de la Semana Santa en Santiago de los Caballeros y la imaginería procesional: representaciones de Cristos y Vírgenes procesionales

La iglesia de la Merced de Antigua Guatemala antes llamada Santiago de los Caballeros

La Orden mercedaria es una de las órdenes religiosas más antiguas en América. En Santiago de los Caballeros Guatemala, esta orden tenía su terreno asignado desde 1541 el cual fue ampliado en 1583 y se logró erigir el templo. El templo Original fue construido en 1546 pero fue remodelado y ampliado en varias ocasiones debido a los terremotos. En la parte superior aparece la figura de San Pedro Nolasco, el fundador de la Orden Mercedaria en el siglo XIII y quien se dedicara a rescatar a los prisioneros castellanos de los moros. Lo acompañan las figuras de dos mercedarios y el escudo mercedario.

Esta iglesia es una de las edificaciones más emblemáticas de La Antigua Guatemala, ya que cuenta con un admirable estilo barroco elaborado en estuco, además de que cuenta con dos campanarios bajos, ocho grandes columnas salomónicas con diseños ornamentales. En la fachada del templo también se puede observar el escudo de la Orden Mercedaria, así como las imágenes de varios santos de esa orden, entre ellos San Pedro Nolasco -fundador de la Orden de Nuestra Señora de la Merced. La figura de nuestra Señora de La Merced está situada en el nicho central de la fachada. Del lado izquierdo se aprecian las esculturas en ladrillo y estuco de San Ramón Nonato y San Pedro Armengol con un lazo que indica su condición de mártir por haber sido ahorcado, y del lado derecho, el obispo mercedario San Pedro Pascual y la primera monja mercedaria, Santa María de Cervellón.

Historia de la semana santa en antigua Guatemala.

Inicia en el tiempo de la colonia pero las primeras procesiones se llevan a cabo a finales del siglo XVI. Estas procesiones iban acompañadas por administradores de la Iglesia católica, entidades civiles y gobierno y se hicieron más fuertes debido a que la fe que se tenía era tan grande que ni los desastres naturales, como terremotos no destruyeron la fe al contrario la reforzaron. Luego se traslada la capital al valle de la ermita en 1776 y las procesiones empezaron a tener lugar incluso en los barrios cercanos. Las celebraciones de semana Santa en Guatemala se viven especialmente Antigua Guatemala la cual antes fue conocida como Santiago de los Caballeros y Quetzaltenango a occidente del país

Sus esculturas en las procesiones o más bien imágenes procesionales se consideran muy importantes, estas también sirvieron para la conversión e indígenas. Un claro ejemplo son los “Nazarenos” que representan a Jesús que aunque se muestra muy lejana la idea con que tenga rasgos precolombinos aun así contiene coincidencias que inciden para lograr conversión. En Santiago de Guatemala existen innumerables tallas de Nazarenos los cuales fueron incorporados en los templos de los Barrios. Esto también llevo a ciertos artistas a responder a las necesidades e identificación racial a través del culto.

Otra información:

  • Los viernes santos se celebra al Jesús de la Merced.

  • La cofradía de la Merced tuvo su primera procesión en 1655

  • El terremoto y los preparativos del traslado de ciudad hicieron que las procesiones dejaran de salir.  No fue sino hasta 1776 cuando la imagen del Jesús Nazareno de la Merced volvió a su tradicional recorrido de viernes Santo. Uno de los problemas que se enfrentaba con el traslado de la ciudad, era el arraigo cultural, tradicional y religioso de las personas.  Por eso, Martín de Mayorga,  ordena que se trasladen las piezas más simbólicas, entre ellas, precisamente, esta de La Merced.  La intención llevaba implícito que se mudara la orden religiosa de los mercedarios.  El traslado de las imágenes escribió uno de los capítulos más pintorescos y destacados del cambio de ciudad.

  • Posiblemente uno de los valores y tradiciones más importantes que jamás perdió la ciudad con el cambio de Santiago de los Caballeros, al de Antigua Guatemala, fue precisamente el fervor religioso a las procesiones. 

  • Jesús Nazareno de la Merced

  • En los años de 1654 a 1714 se pone en evidencia la existencia de un número de imágenes bajo la advocación de Jesús Nazareno de la Merced aunque la Orden Mercedaria en la mitad del siglo XVII tenían una imagen en calidad de préstamo, colocándola en la capilla y utilizada para realizar las funciones de la cofradía. Es así que en 1854 se dio un hecho muy importante, pues el actual mayordomo de la cofradía, Pedro Verdugo, pone de primer y segundo mayordomo a Bartolomé Vázquez Montiel  con Nicolás Pérez de Santa María, ambos encargándose de ya no prestar la imagen del Nazareno debido a diferencias entre las cofradías y padres mercedarios. Por ende decidieron encargar la elaboración de una imagen nazarena al maestro Mateo de Zúñiga; encargándose solamente de hacer la pieza y dejarla en blanco para encargarse del encarnado José de la Cerda. Se entregó el 27 de marzo de 1655 siendo bendecida por Fray Domingo de Izaguirre dando la autorización de colocarla en la capilla para su veneración y culto.

  • Se trasladó del Valle de Panchoy hacia el Valle de la Ermita a causa de los terremotos en Santiago de los Caballeros  el 29 de julio de 1773. Pero, el 25 de 25 de junio de 1778 se rechaza el traslado, es entonces que el Capitán General Don Martin de Mayorga da la orden de trasladar los bienes mercedarios al padre Provincial Fray Simón de Acuña y al Mayordomo Lorenzo García Bahamonde. El 24 de Febrero de 2005, se celebraba el Tercer Jueves de Cuaresma, regresando la Imagen de Jesús de la Merced a su ciudad de origen en conmemoración de sus 350 años de veneración e inicia su peregrinación en la ciudad colonial, desde la Iglesia de Santa Inés del Monte Pulciano, pasando por el puente del Matasano, donde 227 años atrás la feligresía lo había despedido cuando fue trasladado a la nueva ciudad, dirigiéndose al Templo franciscano para luego enfilar por la calle del Arco de Santa Catalina e ingresar al templo mercedario donde fue colocado en un altar para su veneración.

Características generales de la imagen

Posee un claro estilo Barroco con una doble finalidad, es decir, puede colocarse en un altar o retablo para su veneración como en andas de procesión. Tiene una altura aproximadamente de 1.67 m, rostro triangular, cabellera natural, labios entre abiertos que reflejan fatiga dejando observar su dentadura; sus ojos fueron pintados en la misma madera demostrando dolor y sufrimiento. Contiene finos hilos de sangre terminados en gotas. Se nombró como patrón contra las calamidades el 28 de febrero de 1721 justo el primer día de cuaresma. El 5 de octubre de 1987, la imagen fue trasladada a los talleres del Instituto de Antropología e Historia (IDAEH) para una restauración, proceso que le coloca un soporte de hierro para distribuir mejor el peso de la cruz y los vestidos, formado por un cinturón con varillas fijadas a una base que sostiene y protege la peana permitiendo una mejor movilización de la imagen.

 Autor de la obra: Mateo de Zúñiga

Mateo de Zúñiga. Residió en la que conocemos como Antigua Guatemala a mediados del siglo XVII. Hijo de Juan del Castillo y Francisca de Zúñiga, sin descendientes pese a que contrajo matrimonio tres veces. Su obra más importante es “Jesús Nazareno de la Merced” en 1564. Incluso gano fama como ensamblador elaborando importantes obras como el retablo de Nuestra Señora de la Antigua y el retablo de Santo Tomás en la iglesia de Santo Domingo, el retablo principal del sagrario de Catedral.

La Virgen de La Merced

Los católicos celebran cada 24 de septiembre a la Virgen María en la advocación de La Merced o Mercedes, patrona de la Orden de la Merced y Redención de Cautivos. Esta institución religiosa es originaria de Barcelona, España. La Virgen de la Merced es venerada en diferentes partes del país, pero la primera imagen existente en Guatemala es más antigua que la fundación de Santiago y se encuentra en el Templo dedicado a ella en la ciudad capital. La imagen es denominada como una de las “Vírgenes Conquistadoras”, ya que llegó a Guatemala en la primera mitad del siglo XVI.

Se trata de una escultura realizada en madera, cuyos detalles de pintura, esgrafía y cincelado le dan características de una auténtica obra de arte. La imagen es parte del patrimonio de la Iglesia de La Merced, hoy a cargo de la Orden Jesuita, pero por su origen, perteneció a la Orden Mercedaria, la tercera que fundó un convento en Guatemala. Origen Acerca de su procedencia el historiador Domingo Juarros indica lo siguiente: “Aunque desde el principio de las conquistas de la América vinieron religiosos de esta orden a cobrar las mandas de redención, no hay noticia de que tuviese convento alguno en este continente, hasta el año 1537 cuando volviendo el ilustrísimo señor Marroquín de México, trajo cuatro religiosos que fundaron los primeros conventos de Mercedarios que hubo en América.

Uno en la Ciudad Real y otro en Guatemala. Consta de los libros de Cabildos de una y otra ciudad, que el 18 de mayo de 1537 en la primera y en 29 de junio en la segunda, los Mercedarios pidieron sitio para fundar su convento”. Además indicaba que “teniendo ya copia de casas erigieron la Provincia de la Presentación de Nuestra Señora”. Otro dato importante acerca de su origen y su identificación con la fe católica de Guatemala es que en la década de los años veinte del siglo XVII, se recibió aquí la visita del Arzobispo de Myra, y fue el quien el 1 de mayo de 1628, coronó a la Virgen del Convento de los Mercedarios en la Ciudad de Santiago de Guatemala.

La Semana Santa, Viernes Santo desde una vista más actual.

La hermandad de la Merced sigue estando vigente y la conforman alrededor de más de 100 personas entre hombres y mujeres los cuales mantienen la organización y se encargan de realizar las actividades religiosas en la iglesia de la Merced.  La cuaresma y la Semana Santa son una de las fechas más importantes en Antigua Guatemala  en la actualidad las autoridades de la iglesia se encargan de preparar las actividades a realizar en este tiempo.

Se celebra la cuaresma iniciando con el miércoles de ceniza, más adelante un día muy importante celebrado en la iglesia de la Merced es el Viernes Santo el cual da inicio de manera temprana y se puede ver como ya que las celebraciones en este tiempo son continuas, los creyentes preparan las llamadas alfombras para el paso de la procesión del Jesús de

Nazareno penitente y la virgen dolorosa de la Merced.

La actividad da inicio desde muy temprano con la salida de personajes romanos a caballo como una sentencia de muerte a Jesús, por lo que transitan la ciudad dictando la sentencia, la manera en que lo hacen muestra muy viva esta etapa de la vida de Jesús con un misticismo muy presente a la hora de realizarlo, el viernes santo contiene una vibra en el aire que se trasmite a través de estas actividades.

A diferencia de las procesiones en la antigüedad, en la actualidad miles de persona esperan el paso de la procesión en la cual un anda muy grande es cargada por los llamados cucuruchos, el recorrido que hace no es muy largo ya que debe llegar a la iglesia antes de la hora en que Jesús muere.

Cabe mencionar que en el año 2020 y considerando que la iglesia tenía más de 100 años de celebrar estas actividades, tuvo que cerrar sus puertas debido a la pandemia de covid-19.

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